En este capítulo se aborda una variedad de estrategias y enfoques para fomentar y mejorar las habilidades lingüísticas en la infancia, por lo que se destaca la importancia de la intervención psicológica en este proceso. Inicialmente, se exploran estrategias psicológicas diseñadas para fortalecer aspectos clave del desarrollo lingüístico, como actividades interactivas, juegos de rol y simulaciones, que promueven la práctica del lenguaje en contextos auténticos y motivadores. También se examinan las estrategias afectivas y sociales, tales como el refuerzo positivo y el trabajo en equipo, que contribuyen al desarrollo de la autoconfianza y la competencia comunicativa. El capítulo también investiga el papel de la tecnología como apoyo en el desarrollo del lenguaje, destacando cómo las herramientas digitales pueden complementar y potenciar el aprendizaje lingüístico. Finalmente, se considera la relación entre el lenguaje y el comportamiento infantil, destacando cómo un entorno lingüístico positivo puede influir en el desarrollo emocional y social de los niños. Este enfoque integral subraya la necesidad de combinar estrategias psicológicas, tecnológicas y educativas para promover un desarrollo lingüístico equilibrado y eficaz.